Osteopatía y Lactancia

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Osteopatía y Lactancia

El osteópata puede ayudar al logro de una lactancia materna eficaz y exitosa. Es muy recomendable que el osteópata realice  una revisión temprana del recién nacido para prevenir dificultades con la lactancia materna. Cuando ya han aparecido problemas, es posible solucionarlos con el tratamiento adecuado.

El cuerpo humano tiene un automatismo parecido al latido del corazón o a la respiración llamado movimiento respiratorio primario. Se trata de unos movimientos suaves que se originan gracias a la reconstitución del fluido cerebroespinal en los ventrículos cerebrales. De ocho a doce veces por minuto se produce unos mínimos cambios de presión del líquido cefalorraquídeo que se transfieren a las meninges a modo de mareas, y de allí a los huesos móviles del cráneo y al resto del cuerpo.

Un osteópata experimentado puede sentir los suaves movimietos del movimiento respiratorio primario en todo el cuerpo aunque pasen desapercibidos para la mayoría. Puede sentir si son fuertes o débiles, si se producen de manera armónica y regular y sacar así conclusiones sobre las compensaciones y los trastornos funcionales o estructurales.

El osteópata usa los movimientos del mecanismo primario de respiración como instrumento para el diagnóstico y tratamiento.

Un niño con bloqueos o desplazamiento del movimiento natural de los huesos del cráneo, por ejemplo, puede tener grandes dificultades para abrir la boca, agarrar el pecho de su madre o succionar correctamente. O bien agarrar y/o succionar de una manera defectuosa el pecho.  Como consecuencia, pueden aparecer todos estos problemas:

    • No inicio de lactancia materna en niños que realizan gestos de búsqueda pero no son capaces de agarrar el pecho
    • Grietas y dolor en el pezón por una técnica defectuosa del lactante
    • Pérdida de peso del bebé o incremento de peso insuficiente
    • Llantos continuos que las madres interpretan como hambre
    • Recién nacidos que no sueltan el pecho porque no se sacian
    • Ingurgitación de las mamas por mal vaciamiento que puede acabar produciendo una mastitis
    • Producción de leche insuficiete por un estímulo pobre y vaciamiento insuficiente de las mamas

 

Si estas situaciones persisten supondrán la incorporación de leche artificial en la alimentación del bebé, con la pérdida de beneficios para la salud del recién nacido que ésta conlleva. Además de la desilusión o tristeza que muchas mujeres sienten cuando abandonan la lactancia sin desearlo.

El osteópata puede normalizar los bloqueos o desplazamientos del movimiento respiratorio primario del lactante que están originando todos estos problemas de la lactancia materna con el suave tacto de sus manos sobre el bebé. Con una presión de tan solo 5 gramos (casi imperceptible para un adulto) devuelve al bebé su movilidad natural a todas las estructuras afectadas, permitiendo que efectúe una técnica de  succión correcta y facilitando la instauración de una lactancia materna eficaz y exitosa.

Recomendaciones de Osteopatía para una Lactancia Exitosa

Para mejorar la lactancia, como ostéopata, recomiendo:

    • Intentar que el parto sea lo más fisiológico posible.
    • Mantener al bebé en contacto piel con piel con la madre de manera ininterrumpida las 2 primeras horas de vida.
    • Iniciar la lactancia en la primera hora siguiente al parto.
    • Procurar un ambiente tranquilo en las primeras horas, con poca luz, poco ruido, poca gente, para favorecer la adaptación del recién nacido (RN).
    • Permitir que durante el primer contacto, el RN busque y agarre el pecho de su madre por sí mismo, con la mínima ayuda.
    • Ofrecer el pecho a demanda, es decir, que el bebé haga todas las tomas que quiera y el tiempo que quiera, sin mirar el reloj. El objetivo es conseguir al menos 8 tomas en 24 horas.
    • Intentar que el RN permanezca junto a su madre las 24 horas del día.
    • Procurar un correcto vaciado del pecho permitiendo que el bebé succione hasta que lo suelte espontáneamente. Alternar el comienzo en cada toma por el pecho derecho y el izquierdo sucesivamente.
    • Buscar el apoyo de un profesional experimentado en lactancia materna que supervise algunas tomas para comprobar que la técnica es adecuada y realizar un seguimiento de su evolución.
    • Aprender la técnica adecuada (posición, agarre y succión), y como corregir errores.
    • No utilizar el chupete hasta que la lactancia esté perfectamente instaurada, para evitar la confusión del RN en la forma de agarrar y succionar el pezón. La técnica es muy diferente.
    • No dar suplementos de leche artificial ni ningún otro alimento o bebida, excepto si existe una indicación médica.
    • En caso de dar suplementos de leche artificial, hacerlo con vasito o jeringas y no con tetinas, para evitar la confusión del pezón.
    • Procurarse la ayuda necesaria para que la mujer que amamanta a su hijo disfrute del descanso suficiente. Evitar el estrés.
    • Compartir experiencias con otras madres que lactan y contactar con grupos de apoyo.
    • Ante la aparición de dificultades, buscar ayuda adecuada de profesionales con experiencia en lactancia materna.
    • Asesorarse acerca de cómo mantener la lactancia incluso si debe separarse de su hijo.
    • La ducha diaria es suficiente. El pecho no necesita lavados especiales, cremas ni pomadas a no ser que aparezca algún tipo de lesión.
    • Mantener la lactancia materna exclusiva durante 6 meses.

 

La lactancia materna está aún más indicada en prematuros y RN con bajo peso.

Consultar a los grupos de apoyo o a los profesionales especializados cómo continuar la lactancia materna tras la incorporación al trabajo.

Si fuera necesario tomar algún medicamento consultar la página web www.e-lactancia.org. Hay muchísimos fármacos compatibles con la lactancia.

Visita en la primera semana al pediatra y a la matrona para detectar precozmente problemas con la lactancia y ponerles solución.

Puede ser muy útil una revisión preventiva del osteópata para corregir posibles afecciones en las estructuras corporales y en sus funciones debidas al complejo mecanismo del nacimiento.